Carretera al infierno es un remake de un film de culto, que tiene ya más de 21 años con respecto a este(1986-2007). Sorprendentemente veo que ha sido MASACRADO por la crítica y el público en general: las críticas mas generosas han sido de un 4/10 y en los cines USA el film apenas llegó a los 17 millones de dólares de recaudación. No debemos de ser injustos y olvidar que precisamente el original no fue tampoco un gran éxito de taquilla(solo recaudó en cines USA 2 millones de dólares en 1986) y fue descubierto por muchos gracias al VHS. ¿Era necesario este remake? ¿Alguien sería capaz de hacer olvidar el gran papel de Rutger Hauer? Carretera al infierno, la original era un film especial sin lugar a dudas. Una pareja de jóvenes recorría desolados parajes perseguidos por un psicópata misterioso del cual no sabemos absolutamente nada, ni sus motivaciones, ni cuanto tiempo lleva matando, etc... Era un viaje por paisajes abiertos agobiantes y una maldad sin límites imposible de comprender, producto de ese terrible asesino. Con la nueva oleada de remakes de última generación, es lógico pensar en acercar esos films de culto y míticos(eran realmente buenos) a estas nuevas generaciones de espectadores, con un lavado de cara visual y formal, adaptado a nuestros tiempos fashions y digitales. Carretera al infierno, en concreto este film que analizo ahora, muestra una FASCINANTE belleza y fotografía(James Hawkinson) a la par de la EXTRAORDINARIA dirección que me dejó atónito, por parte de Dave Meyers, en su debut en el cine, autor de numeros videoclips para Jennifer Lopez o Britney Spears entre otros. Os juro que flipaba con los planos, los encuadres, las secuencias, la fotografía... Entonces pensé: "Diablos... este es el tipo que debe de dirigir el nuevo remake de 1997: Rescate en New York y no Len Wiseman(Underworld 2) o Bret ratner(X-men 3). ¡Este tipo sí que haría que el film fuese una pasada!" Igualmente el film cuenta con una producción irrepochable en todas las líneas, y Sean Bean(Boromir en El señor de los Anillos) no deja de ser una elección estupenda para hacernos olvidar a Rutger Hauer, ya que su interpretación es FABULOSA y muy CARISMÁTICA. El guión, remodelado conjuntamente con el autor del guión de 1986, Eric Red, es excelente, manteniendo todos los puntos del original, y sobre todo dotándolo de un clímax final más intenso y espectacular. Visto de manera fría, Carretera al infierno no solo es un remake excelente, es un FILM EXCELENTE. De hecho esta tarde lo he visionado junto con otras películas, y lo había dejado para el final, pensando que era el peor y que me decepcionaría terriblemente tras leer sus malas críticas vertidas por compañeros mios, pero que va... ¡LA VI DOS VECES SEGUIDA! Pienso que algunos creerán que estoy loco o que me va comer caviar, o dicho groseramente, me encanta comer excrementos, pero pienso que el film no ha triunfado(y eso que es excelente) por varias razones de peso que son facilmente detectables. En primer lugar la pareja de protagonistas adolescentes es lamentable. Sus elecciones son poco acertadas y sus interpretaciones de pena. Sencillamente no hay NINGUNA QUÍMICA entre ellos, y su potenciada historia de amor respecto al original es uno de los tristes lastres del film, porque nadie se la traga ni le interesa ni es creible. La escena de la ducha con ambos desnudos y abrazados es sonrojante. No digo que se pusiera ella de rodilla y le comiera la polla, o que le lamiera los pezones al tio, pero de verdad ella parece más preocupada de que la cámara no le filme sus pezones que de estar comoda, enamorada y apasionada. La actriz en cuestión es Sophia Bush, una joven y hermosa actriz de televisión(que ha participado en Sabrina y Nip/Tuck, una de las series favoritas de mi amada mujer), que en el 2006 ya se adentró en el cine de terror con Stay Alive, un film entretenido y mejor de lo que parecía a priori. Pero esta chica, sufre de un problema. Es guapa, tiene físico y es buena actriz, pero no es una gran actriz. Esa es la diferencia entre ser buena y ser impresionante. Es como un fórmula uno, hay un salto de nivel entre los Ferrari y los McLaren que a pesar de ser de segundos en las carreras, suponen la diferencia entre ganar campeonatos y perderlos. Por eso Sophia Bush falla en bastantes escenas de TREMENDA INTENSIDAD DRAMÁTICA a las que simplemente no llega a dar la talla, y eso que se esfuerza de manera notable y hasta sus límites. La escena final con ella con la escopeta es una de esas escenas. No es que parezca ridícula o risible, sino que la chavala no daba para más. Como iba comentando, los problemas de éxito del film fueron precisamente esos: una pareja protagonista muy floja, poca química entre ellos y situaciones del film que flojean precisamente por culpa de ello. A todo esto hay que sumarle una distribución limitada y una publicidad casi INEXISTENTE. De hecho casi nadie se enteró de que se hizo este remake, y fue tan pobre su campaña publicitaria, que nadie quiso perder el tiempo en comprobar si este film era tan bueno o no como su original. Es una lástima, porque la película es realmente BUENA. Mi pregunta ahora es la siguiente. Imaginaros que monto un restaurante chino con una comida exquisita... Y cuando lo tengo todo listo y preparado no pongo ni publicidad, ni un cartel fuera del local, y encima pinto todos los cristales de negro, para que nadie vea que hay dentro. Es lógico pensar que nadie ENTRARÁ en mi negocio y que me moriré de hambre, y lo tendré que cerrar. ¿Entonces para que diablos lo he montado? Eso mismo sucede con muchas producciones de Hollywood que como en este caso, con presupuestos muy reducidos, confían muy poco en ellas y no se toman ni la molestia de ayudarlas a levantar vuelo. El film, invierte los papeles al final de la pareja protagonista. Si en el original muere la chica, aquí muere el chico, y es la joven quien se encarga de enfrentarse con el terrible autoestopista asesino. Hay quien achaca a la cinta que es demasiado gore, sangrienta y explicita(aquí vemos como parten en dos a la persona con el camión, en el original no) dando cancha a la sangre en ves de al suspense como en el film original, pero pienso que ese punto no le queda mal a este film. Por último tuvo otro pensamiento viendo el film, sus carreteras, coches chocando, etc... Esto sí que es lo que tuvo que ser Death Proof, verdadero grindhouse entretenido, violento, excitante y con dos agallas. Muchos de los planos de Carretera al inferno me recordaban momentos potentes de Mad Max y Mad Max 2. Y eso es mucho, amigos. En cambio del BODRIO de Death Proof aun despierta pesadillas en mi. Hay que ser gilipollas para pensar que esa tomadura de pelo de Quentin Tarantino es ni siquiera digna de ser tomada en cuenta. Carretera al infierno es una de las SORPRESAS del 2007, a pesar de su pareja protagonista sin química.
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