Analizando CON RIGOR el film veremos que su taquillaje en USA fue de poco más de 5 millones de dólares en el año 98. ¡5 MISERABLES MILLONES!
¿Cómo se come eso? Las respuestas pueden ser:
a) El film era malo
b) El film no interesó a nadie
c) El film no poseía gancho de atracción a las salas
Ahora os contaré un cuento:
En un pueblo desaparecen 700 personas y unas están muertas de forma rara. Algo está en el subsuelo o en el sistema de alcantarillado y aguas del pueblo. Ese algo es una especie de substancia negra que es una entidad con conciencia e inteligencia propia. Es como decir que un charco de petroleo sabe más de música que un violnista, cosa muy difícil de creer. Pero dicha entidad es capaz de hacer de todo: resucitar muertos, controlarlos mentalmente como si de un ejército de autómatas se tratara, infectar perros en el más puro estilo de La cosa, provocar terremotos o convertirse en un gigantesco monstruo con muy malas pulgas. ¿Pero que diablos es algo tan prodigioso, con tantos recursos y tan polivalente?
La novela en la que se basa este film, de Dean R. Koontz, especula con la idea de que esa cosa es una entidad prehístorica que vive lantente bajo tierra y que cada ciertos siglos sale a la superficie y se mama a alguna civilización humana, explicando por ejemplo la desapareción de antiguas culturas sudamericanas como los mayas. Esto, es un argumento interesante y atractivo y sobre todo con muchas posibilidades.
Es de esas historias que la hacen la boca agua a Iker Jimenez, de Cuarto Milenio y le hace decir cosas como:
"...estamos ante unos documentos únicos y reales que revelamos en exclusiva y que pueden hacer tambalear los cimientos del pensamiento científico moderno..."
"...esta información puede hacernos comprender y enseñarnos cosas, que nunca antes han sido reveladas..."
"...estos documentos históricos y reales son completamente auténticos. Debemos de aceptar la verdad con seriedad..."
El film contó con Ben Aflleck, Peter O'Toole o Rose McGowan como protagonistas, en un film que en primer lugar no sabe a que juega, pero el problema no radica en los hechos, sino en la endeble y poco creible base, es decir, su guión.
El film comienza al más puro estilo Silent Hill, con un misterioso pueblo abandonado en donde los protagonistas se unen frente a una desconocida amenaza. Hasta ahí bien. El tema está que por un lado el reparto en general es bastante mediocre, salvando algunas interpretaciones, pero los personajes.... Ay Dios mio baja de los cielos, la mayoría de los personajes son espantosos, unidimensionales, tristes y con diálogos horribles. Ante semejante panorama vemos que el film camina a la deriva: mezcla cine bacteriológico, luego se saca escenas en plan La cosa, luego apunta detalles religiosos, y luego se va sacando de la manga zombies y disparates a más no poder. ¿Puede ser tomado en serio un film en que el tipo escupe la mencionada substancia prehistórica inteligente sobre una cristal, esta se tranforme en una salamandra y el bichillo vivito y coleando se marche tan dicharachero? Una majadería, pero lo peor es que es un desporpósito tan grande que según pasan los minutos en el film, este pierde entereza, credibilidad o interés.
Lo que comienza muy bien acaba en un caos y en una confusión total. Un desastre de film que juega a demasiadas cosas, tiene un guión horrible y no sabe marcar línea o definirse, para intentar ser auténtico.
Un film MUY FALLIDO y demasiado IRREGULAR. Solo para fans del escritor Dean R. Koontz que quieran ver como se destrozan sus novelas(que tampoco son para tanto) cuando saltan a la gran pantalla.
Source URL: https://ojoknesublogs.blogspot.com/2008/12/phantoms-joe-chappelle-phantoms-1998.html¿Cómo se come eso? Las respuestas pueden ser:
a) El film era malo
b) El film no interesó a nadie
c) El film no poseía gancho de atracción a las salas
Ahora os contaré un cuento:
En un pueblo desaparecen 700 personas y unas están muertas de forma rara. Algo está en el subsuelo o en el sistema de alcantarillado y aguas del pueblo. Ese algo es una especie de substancia negra que es una entidad con conciencia e inteligencia propia. Es como decir que un charco de petroleo sabe más de música que un violnista, cosa muy difícil de creer. Pero dicha entidad es capaz de hacer de todo: resucitar muertos, controlarlos mentalmente como si de un ejército de autómatas se tratara, infectar perros en el más puro estilo de La cosa, provocar terremotos o convertirse en un gigantesco monstruo con muy malas pulgas. ¿Pero que diablos es algo tan prodigioso, con tantos recursos y tan polivalente?
La novela en la que se basa este film, de Dean R. Koontz, especula con la idea de que esa cosa es una entidad prehístorica que vive lantente bajo tierra y que cada ciertos siglos sale a la superficie y se mama a alguna civilización humana, explicando por ejemplo la desapareción de antiguas culturas sudamericanas como los mayas. Esto, es un argumento interesante y atractivo y sobre todo con muchas posibilidades.
Es de esas historias que la hacen la boca agua a Iker Jimenez, de Cuarto Milenio y le hace decir cosas como:
"...estamos ante unos documentos únicos y reales que revelamos en exclusiva y que pueden hacer tambalear los cimientos del pensamiento científico moderno..."
"...esta información puede hacernos comprender y enseñarnos cosas, que nunca antes han sido reveladas..."
"...estos documentos históricos y reales son completamente auténticos. Debemos de aceptar la verdad con seriedad..."
El film contó con Ben Aflleck, Peter O'Toole o Rose McGowan como protagonistas, en un film que en primer lugar no sabe a que juega, pero el problema no radica en los hechos, sino en la endeble y poco creible base, es decir, su guión.
El film comienza al más puro estilo Silent Hill, con un misterioso pueblo abandonado en donde los protagonistas se unen frente a una desconocida amenaza. Hasta ahí bien. El tema está que por un lado el reparto en general es bastante mediocre, salvando algunas interpretaciones, pero los personajes.... Ay Dios mio baja de los cielos, la mayoría de los personajes son espantosos, unidimensionales, tristes y con diálogos horribles. Ante semejante panorama vemos que el film camina a la deriva: mezcla cine bacteriológico, luego se saca escenas en plan La cosa, luego apunta detalles religiosos, y luego se va sacando de la manga zombies y disparates a más no poder. ¿Puede ser tomado en serio un film en que el tipo escupe la mencionada substancia prehistórica inteligente sobre una cristal, esta se tranforme en una salamandra y el bichillo vivito y coleando se marche tan dicharachero? Una majadería, pero lo peor es que es un desporpósito tan grande que según pasan los minutos en el film, este pierde entereza, credibilidad o interés.
Lo que comienza muy bien acaba en un caos y en una confusión total. Un desastre de film que juega a demasiadas cosas, tiene un guión horrible y no sabe marcar línea o definirse, para intentar ser auténtico.
Un film MUY FALLIDO y demasiado IRREGULAR. Solo para fans del escritor Dean R. Koontz que quieran ver como se destrozan sus novelas(que tampoco son para tanto) cuando saltan a la gran pantalla.
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