Un extraño film que parte de una no mala idea a priori, pero que una extraña ejecución destroza sin piedad, conduciendo el resultado final a casi una catástrofe.
Esta producción británica, en co-producción con Grecia, con director griego, con actores griegos y rodada en Grecia, simplemente nos cuenta una breve e insípida historia de un culto satánico cuyos brujos son inmortales.
Ellos basan su inmortalidad y poder en sacrificios humanos a una divinidad de la antigua grecia que no es otra que un minotauro.
Pero no nos emocionemos... En este film no sale el monstruo, de forma incomprensible, sino que ese culto venera a una estatua antigua que echa fuego por la nariz y que tiene unos micro-genitales (foto 3). Es decir que esta mezcla de toro y humano, grande y musculoso y lleno de mala hostia, tiene un pito que da risa.
El culto del minotauro está capitaneado por Peter Cushing haciendo de un poderoso y rico aristócrata, y por al otro lado del ring, investiga el culto un sacerdote que no es otro que el siempre sólido Donald Pleasance, que se lo pasó bien en el rodaje. Solo hay que ver la foto de él (foto 2) junto a la rubia cañón.
Pues nada, aparte de ver víctimas femeninas sufriendo ante de ser sacrificadas y que parecer tener orgasmos de gusto (foto 1) en vez de llorar, estamos ante un rollo patatero aburrido y sin interés.
Ciero es que el poster se las promete mucho, y el nombre de la película también, pero la realidad de este film es tan vacía como desoladora.
Fabuloso es el detalle (hay que estar atentos) de que apuñalan en el corazón a las víctimas con... ¡Un cuchillo de untar mantequilla! HAHAHAHAHAHAHAHAHAHA ¡Uno de esos de punta redonda para untar mermelada y mantequilla en las tostadas!¡La puta madre que me parió! HAHAHAHAHAHA
Al final entre tanto coñazo y despropósito llega un inusual clímax realmente explosivo. Los sacerdotes pues revientan entre explosiones, como si fueran pavos rellenos de dinamita.
Los encapuchados revientan entre fuegos artificiales, llamaradas y algunos pues rollo Contaminación alien, soltando pedazos de carne para la barbacoa que se ha liado. Hahahaha
Ver foto 4, que hasta el truco se nota una de las veces, cuando vemos que la cabeza del maniquí es independiente del cuerpo, y en su cuello lleva un mecanismo metálico que es el explosivo y el detonador.
Si no les bastó con cagarla con el cuchillo de la mantequilla, hasta haciendo explotar los maniquís fueron malos de cojones.
UN ESPERPENTO INFUMABLE en clave Griega. Y del minotauro ni rastro. ¡Si casi ni le vemos los huevos en su estatua! HAHAHAHAHAHAHA
Esta producción británica, en co-producción con Grecia, con director griego, con actores griegos y rodada en Grecia, simplemente nos cuenta una breve e insípida historia de un culto satánico cuyos brujos son inmortales.
Ellos basan su inmortalidad y poder en sacrificios humanos a una divinidad de la antigua grecia que no es otra que un minotauro.
Pero no nos emocionemos... En este film no sale el monstruo, de forma incomprensible, sino que ese culto venera a una estatua antigua que echa fuego por la nariz y que tiene unos micro-genitales (foto 3). Es decir que esta mezcla de toro y humano, grande y musculoso y lleno de mala hostia, tiene un pito que da risa.
El culto del minotauro está capitaneado por Peter Cushing haciendo de un poderoso y rico aristócrata, y por al otro lado del ring, investiga el culto un sacerdote que no es otro que el siempre sólido Donald Pleasance, que se lo pasó bien en el rodaje. Solo hay que ver la foto de él (foto 2) junto a la rubia cañón.
Pues nada, aparte de ver víctimas femeninas sufriendo ante de ser sacrificadas y que parecer tener orgasmos de gusto (foto 1) en vez de llorar, estamos ante un rollo patatero aburrido y sin interés.
Ciero es que el poster se las promete mucho, y el nombre de la película también, pero la realidad de este film es tan vacía como desoladora.
Fabuloso es el detalle (hay que estar atentos) de que apuñalan en el corazón a las víctimas con... ¡Un cuchillo de untar mantequilla! HAHAHAHAHAHAHAHAHAHA ¡Uno de esos de punta redonda para untar mermelada y mantequilla en las tostadas!¡La puta madre que me parió! HAHAHAHAHAHA
Al final entre tanto coñazo y despropósito llega un inusual clímax realmente explosivo. Los sacerdotes pues revientan entre explosiones, como si fueran pavos rellenos de dinamita.
Los encapuchados revientan entre fuegos artificiales, llamaradas y algunos pues rollo Contaminación alien, soltando pedazos de carne para la barbacoa que se ha liado. Hahahaha
Ver foto 4, que hasta el truco se nota una de las veces, cuando vemos que la cabeza del maniquí es independiente del cuerpo, y en su cuello lleva un mecanismo metálico que es el explosivo y el detonador.
Si no les bastó con cagarla con el cuchillo de la mantequilla, hasta haciendo explotar los maniquís fueron malos de cojones.
UN ESPERPENTO INFUMABLE en clave Griega. Y del minotauro ni rastro. ¡Si casi ni le vemos los huevos en su estatua! HAHAHAHAHAHAHA
Nombres en otros paises:
The Devil's Men
La secte des morts-vivants
I maska tou Diavolou
La valle del minotauro
The Devil's People
Land of the Minotaur Poster
ミノタウロスの土地
妖魔的仆役
미노타의 나라
Земля минотавра
O Vale do Minotauro
Source URL: https://ojoknesublogs.blogspot.com/2011/07/poseidos-por-el-demonio-kostas.html
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