Contra todo pornóstico la incursión de Sylvester Stallone en la ciencia ficción fue DIVERTIDÍSIMA.
El film, con un presupuesto de notable recaudó 58 millones en cines USA y fue muy popular.
La historia es que John Spartan, es un policía que cada vez que se mete en fregados, parece un equipo de demolicíon, destuyendo hasta edificios. Ok, el hombre resuelve crisis y situaciones de alto riesgo, pero sus acciones entrañas siempre daños colaterales catastróficos, por lo que lo apodan Demolition Man.
El malvado es Simon Phoenix, Wesley Snipes, bordando un papel muy físico, y que tiene dos caras. Por un lado es un terrible criminal pero por el otro tiene un sentido del humor que hace que te destornilles de la risa.
El film, comienza en una escena de acción muy espectacular, con John Spartan saltando de un helicóptero a un edificio lleno de criminales que tienen secuestradas un montón de personas, y como concluye todo con el edificio volando por los aires (de verdad, no digitalmente, lo que tiene su gran merito), muriendo inocentes.
Tanto el explosivo policía como el malvado criminal son congelados como merluzas y condenados a estar un montón de años tiesos como estatuas.
La cuestión es que Simon escapa en el futuro y causa en el terror en una nueva y pacífica sociedad, que se ha vuelto cursi y ridícula a más no poder. Imposibilitados para detenerlo, deciden descongelar a John Spartan, para que lo detenga.
La película tiene varios puntos:
-Tiene mucha acción.
-Tiene muchas escenas cómicas. ¿Cómo se limpian en el futuro el culo tras cagar con unas conchas? O como Spartan, para tener papel higiénico, empieza a a decir una larga sucesión de insultos a una máquina que le va dando multas, para limpiarse el trasero con ellas.
-Ofrece una visión del futuro irónica y estúpida, lo cual provoca numerosas situaciones que nos dejan con una sonrisa en la boca, como ver como follan en el futuro, virtualmente, mediante unos cascos.
En este conjunto que mezcla mucha acción con comedia e ironia, todo ello lacado con ciencia ficción, hay que destacar que el conjunto funciona sorprendentemente bien, con soltura y solidez, haciendo que pases un rato MUY DIVERTIDO.
Encima los caracteres tanto de Stallone como de Snipes destilan química y funcionan.
Este film le debe mucho a los comics, copiando mucho su estética y narrativa, de manera muy acertada.
Sandra Bullock, que esta bien dentro de su rol, no fue la primera elección y entró sistituyendo a Lori Petty, teniendo que a hacer escenas ya grabadas con dicha actriz, de nuevo.
Stallone quería a Jackie Chan de malo, pero declino la oferta porque no quería el público oriental viera su imagen de héroe degradada.
Elecciones para malo fueron Steven Seagal, que dijo que no, y Jean Claude Van Damme, que en principio dijo que no, pero luego dijo que si, sí hacía ambos papeles al mismo tiempo, el de bueno y el de malo. Vaya obsesión tiene este hombre con duplicarse en la gran pantalla: no le bastó de Doble Impacto y Replicant en que también quería salir repetido en este Demolition Man. ¿Dos hermanos gemelos enfrentándose o clones luchando entre ellos? Menudo ejercicio de egocentrismo.
Y ahora hablemos de la polla de Sylvester Stallone...
En 1993 salió si mal creo recordar (puedo equivocarme de revista) en un número de la revista Fotogramas una foto de Sylvester Stallone en el rodaje de Demolition Man, en las escenas donde es congelado, en un desnudo frontal IMPECABLE. Joder, el hombre luce perfecto, super nítido y le cuelga relajada una pedazo de polla descapullada de un palmo de larga. ¡Joder! Si ese se pone duro... ¿Cuanto entonces le medirá?
El caso es que todavía a mí algo no me cuadra. Sí cuando era joven, en el film que protagonizó, El potro italiano, se ve desnudo y tiene una pichita que parece que se acaba de duchar con agua fría. ¿Cómo es que años mas tarde, de mayor, luce un pollón que no tiene nada que envidiar al de Nacho Vidal o al de Rocco Siffredi?
Total que mosqueado ante el asunto recuerdo que le enseñé la revista a un señor mayor que era jefe de cocina llamado Julian.
El tipo había estado de cocinero en barcos mercantes toda la vida y era todo un pesonaje: ¡Había escrito un libro sobre salsas! El julian este te hacía una salsa Perrins clavada a la que comprabas en el supermercado en cinco minutos. ¡Doy fe de ello!
Un día no se que hostias hizo, y no puso el freno de mano al coche, estaba haciendo no se que, y el coche se le vino encima y le rompió una pierna. Ahora imaginaros el percal... En el hotel donde yo, muy jovencito, trabaja de camarero solo tenía una persona en la cocina: ÉL. Ese hombre ya mayor era cocinero, ayudante y fregaplatos. Vamos, un hombre para todo. Trabajabamos en un hotel de alta montaña y no había recambio para él ni se podía encontrar a nadie, pues vivíamos en un país en donde habían cupos de empleados para cada lugar, que otorgaba el departamento de inmigración.
Lo alucinante era ver el comedor del hotel lleno, igual con más de cincuenta personas (era un hotel pequeño de tres estrellas) y ver a Julian con la pierna enyesada casi hasta los huevos, tiesa como si fuera de marmol trabajando en la cocina como un loco. El hombre, le entiendo, me pedía alcohol, así que se emborrachaba para trabajar y soportar el dolor.
Ahora imaginaros que yo cada vez que entraba en la cocina veía a aquel viejete de pelo blanco, caminando de forma patética con toda la pierna escayolada, borracho y cantando: "Soy el rey de las salsas... Soy el rey de las salsas..." Os juro que me daban unos ataques de risa tremendos.
A lo que iba...
Julian miró la foto de Stallone con el pijo al aire y me dijo una interesante reflexión.
"Si han hecho los dinosaurios de Parque Jurásico por ordenador igual a este le han hecho lo mismo"
BINGO. Muy bien Julian. Creo que esa es la respuesta al enigma de la polla de Stallone, ordenador o un hábil fotomontaje. No he incluido la foto aquí pues porque no la he encontrado.
Sí la encuentro un día la cuelgo aquí sin problemas.
Un film que sin pretender descubrir América es MUY ENTRETENIDO Y DIVERTIDO.
Source URL: http://ojoknesublogs.blogspot.com/2009/02/demolition-man-marco-brambilla.htmlEl film, con un presupuesto de notable recaudó 58 millones en cines USA y fue muy popular.
La historia es que John Spartan, es un policía que cada vez que se mete en fregados, parece un equipo de demolicíon, destuyendo hasta edificios. Ok, el hombre resuelve crisis y situaciones de alto riesgo, pero sus acciones entrañas siempre daños colaterales catastróficos, por lo que lo apodan Demolition Man.
El malvado es Simon Phoenix, Wesley Snipes, bordando un papel muy físico, y que tiene dos caras. Por un lado es un terrible criminal pero por el otro tiene un sentido del humor que hace que te destornilles de la risa.
El film, comienza en una escena de acción muy espectacular, con John Spartan saltando de un helicóptero a un edificio lleno de criminales que tienen secuestradas un montón de personas, y como concluye todo con el edificio volando por los aires (de verdad, no digitalmente, lo que tiene su gran merito), muriendo inocentes.
Tanto el explosivo policía como el malvado criminal son congelados como merluzas y condenados a estar un montón de años tiesos como estatuas.
La cuestión es que Simon escapa en el futuro y causa en el terror en una nueva y pacífica sociedad, que se ha vuelto cursi y ridícula a más no poder. Imposibilitados para detenerlo, deciden descongelar a John Spartan, para que lo detenga.
La película tiene varios puntos:
-Tiene mucha acción.
-Tiene muchas escenas cómicas. ¿Cómo se limpian en el futuro el culo tras cagar con unas conchas? O como Spartan, para tener papel higiénico, empieza a a decir una larga sucesión de insultos a una máquina que le va dando multas, para limpiarse el trasero con ellas.
-Ofrece una visión del futuro irónica y estúpida, lo cual provoca numerosas situaciones que nos dejan con una sonrisa en la boca, como ver como follan en el futuro, virtualmente, mediante unos cascos.
En este conjunto que mezcla mucha acción con comedia e ironia, todo ello lacado con ciencia ficción, hay que destacar que el conjunto funciona sorprendentemente bien, con soltura y solidez, haciendo que pases un rato MUY DIVERTIDO.
Encima los caracteres tanto de Stallone como de Snipes destilan química y funcionan.
Este film le debe mucho a los comics, copiando mucho su estética y narrativa, de manera muy acertada.
Sandra Bullock, que esta bien dentro de su rol, no fue la primera elección y entró sistituyendo a Lori Petty, teniendo que a hacer escenas ya grabadas con dicha actriz, de nuevo.
Stallone quería a Jackie Chan de malo, pero declino la oferta porque no quería el público oriental viera su imagen de héroe degradada.
Elecciones para malo fueron Steven Seagal, que dijo que no, y Jean Claude Van Damme, que en principio dijo que no, pero luego dijo que si, sí hacía ambos papeles al mismo tiempo, el de bueno y el de malo. Vaya obsesión tiene este hombre con duplicarse en la gran pantalla: no le bastó de Doble Impacto y Replicant en que también quería salir repetido en este Demolition Man. ¿Dos hermanos gemelos enfrentándose o clones luchando entre ellos? Menudo ejercicio de egocentrismo.
Y ahora hablemos de la polla de Sylvester Stallone...
En 1993 salió si mal creo recordar (puedo equivocarme de revista) en un número de la revista Fotogramas una foto de Sylvester Stallone en el rodaje de Demolition Man, en las escenas donde es congelado, en un desnudo frontal IMPECABLE. Joder, el hombre luce perfecto, super nítido y le cuelga relajada una pedazo de polla descapullada de un palmo de larga. ¡Joder! Si ese se pone duro... ¿Cuanto entonces le medirá?
El caso es que todavía a mí algo no me cuadra. Sí cuando era joven, en el film que protagonizó, El potro italiano, se ve desnudo y tiene una pichita que parece que se acaba de duchar con agua fría. ¿Cómo es que años mas tarde, de mayor, luce un pollón que no tiene nada que envidiar al de Nacho Vidal o al de Rocco Siffredi?
Total que mosqueado ante el asunto recuerdo que le enseñé la revista a un señor mayor que era jefe de cocina llamado Julian.
El tipo había estado de cocinero en barcos mercantes toda la vida y era todo un pesonaje: ¡Había escrito un libro sobre salsas! El julian este te hacía una salsa Perrins clavada a la que comprabas en el supermercado en cinco minutos. ¡Doy fe de ello!
Un día no se que hostias hizo, y no puso el freno de mano al coche, estaba haciendo no se que, y el coche se le vino encima y le rompió una pierna. Ahora imaginaros el percal... En el hotel donde yo, muy jovencito, trabaja de camarero solo tenía una persona en la cocina: ÉL. Ese hombre ya mayor era cocinero, ayudante y fregaplatos. Vamos, un hombre para todo. Trabajabamos en un hotel de alta montaña y no había recambio para él ni se podía encontrar a nadie, pues vivíamos en un país en donde habían cupos de empleados para cada lugar, que otorgaba el departamento de inmigración.
Lo alucinante era ver el comedor del hotel lleno, igual con más de cincuenta personas (era un hotel pequeño de tres estrellas) y ver a Julian con la pierna enyesada casi hasta los huevos, tiesa como si fuera de marmol trabajando en la cocina como un loco. El hombre, le entiendo, me pedía alcohol, así que se emborrachaba para trabajar y soportar el dolor.
Ahora imaginaros que yo cada vez que entraba en la cocina veía a aquel viejete de pelo blanco, caminando de forma patética con toda la pierna escayolada, borracho y cantando: "Soy el rey de las salsas... Soy el rey de las salsas..." Os juro que me daban unos ataques de risa tremendos.
A lo que iba...
Julian miró la foto de Stallone con el pijo al aire y me dijo una interesante reflexión.
"Si han hecho los dinosaurios de Parque Jurásico por ordenador igual a este le han hecho lo mismo"
BINGO. Muy bien Julian. Creo que esa es la respuesta al enigma de la polla de Stallone, ordenador o un hábil fotomontaje. No he incluido la foto aquí pues porque no la he encontrado.
Sí la encuentro un día la cuelgo aquí sin problemas.
Un film que sin pretender descubrir América es MUY ENTRETENIDO Y DIVERTIDO.
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