El bosque del lobo es un film maravilloso de horror y miserias humanas. A mediados del siglo 19, en un espacio comprendido entre Galicia y León, en territorio Español, descubrimos esta adaptación de una novela de bastante repercusión en su tiempo basado en unos hechos reales escalofriantes. Pero para poder hablar del film o de esos hechos hay que describir un poco la situación social, humana y económica de aquel tiempo.Hace dos siglos, a mediados del siglo XIX, España vivía ruralmente en el más absoluto de los abandonos y misería. La vida en los pueblos era muy dura, mucho, se pasaban muchas calamidades y necesidades y el analfabetismo era total: ningún campesino, peón, ganadero o agricultor sabía leer o escribir. Ni en los pueblos habían escuelas o doctores, lo más básico y elemental. Como en este film y como sucedió en la realidad en muchos pueblos rurales de la España profunda de aquellos tiempos, no existían alcaldes o políticos, sino que la figura de líder de un pueblo era el cura o algún cacique, quienes guardaban la paz, mediaban en los conflictos o impartían justicia. Era tiempos muy duros. Tampoco había servicio de correos, internet, teléfono o algo parecido. Encima salvo caminos que comunicaban las grandes urbes de aquel entonces, muchos de ellos herededos de los tiempos romanos, entre pueblos no había ni caminos, ni carreteras ni nada: solo inmensas extensiones muy frondosas de bosques. Hay que pensar que ahora en el 2007, sobrepasamos en España los 45 millones de personas y en aquellos tiempos la población de España era de solo de siete millones de habitantes, con una densidad de población mucho más reducida. Eran tiempos tan duros que mucha gente de regiones deprimidas de Galicia emigraban en la más absoluta miseria y Sudamérica: Cuba, Venezuela, Argentina, etc...
Explicado ya esto un personaje, un buhonero que lleva a cuestas una gran mochila hecha a mano de lona y maderas atadas, va entre esos pueblos recorriendo los bosques y vende velas, escapularios y chorradas de esas a los campesinos. Su vida es siempre caminando y caminando cientos y cientos de kilómetros. Ese hombre hace de guía y lleva a gentes por los bosques que por ejemplo quieren emigrar de un pueblo a la ciudad, lleva cartas por encargo de un lado a otro, etc... Y en esos viajes a pie, el hombre sufre unos ataque de furia y estrangula a sus víctimas en medio de los bosques, les roba sus pertenencias y luego las revende en la ciudad. Benito Freire, es un hombre reservado, serio, responsable y muy cristiano y nadie osaría dudar de ninguna mala intención por su parte. Luego hace llegar cartas falsas en los pueblos, para que las mujeres hayan a trabajar a ricas tierras y casas en la ciudad, pero en los bosques mata sin poderse resistir a sus desgraciadas víctimas.
Por un lado tenemos el reflejo social de aquel tiempo, de esa miseria y de aquella ignorancia. Por otro lado el de Benito Freire, un hombre atormentado, desequilibrado, extraño, que borda EN UN PAPEL MAGISTRAL E INSUPERABLE Jose Luis Lopez Vazquez, en un papel tan impresionante y está tan bien caracterizado que casi ni se le reconoce su larga y notable trayectoria cómica en cine y teatro, lo que demuestra su gran valía y categoría como actor, al encarnar un papel tan complejo y lleno de matices. Por otro lado tenemos la desgracia fatalista de como un torpe desgraciado y pobre diablo como Benito Freire, va enredándose a si mismo en una espiral de mentiras, robos y conductas extrañas, que hacen que al final sea descubierto y perseguido. Es un ambiente de todos esos tres elementos muy fatalista, muy fúnebre y muy trágico. Por todo ello el film está muy bien, es muy recomendable, es muy interesante, todos los personajes son excelentes (el cura me encanta) y los diálogos son soberbios. Es un film a recuperar de todas todas, y en el que hace referencia a los Lobishomes (Hombre lobo) que es un término campesino que se refiere a hombre-bestias o asesinos enloquecidos, que en los bosques atacan como animales rabiosos a sus semejantes.
La historia real difiere bastante del film. Es como en el caso del film Las colinas tienen ojos. El protagonista real no se llamaba Benito Freire sino Manuel Blanco Romasanta. Fué sastre y con 21 años se casó y su mujer murió 3 años más tarde en misteriosas circunstancias. Su negocio iba a ser embargado por una deuda de 600 escudos por un alguacil, que apareció poco después asesinado también en extrañas circunstancias. Romasanta fué juzgado y condenado a 10 años de prisión, pero consiguió escapar y se hizo buhonero, trasladándose a otras regiones de España, lejos de su población natal.
Romasanta era un hombre bajo, de 133 cmts de altura, y gustaba de trabajar la lena, coser, estar en la cocina rodeado de mujeres, y según dicen era un poco amanerado, pero solo pueda que esa sea un percepción de los hombre muy machistas de aquel tiempo, que consideraban indigno trabajar o emplearse en tareas reservadas para las mujeres. En 1846 y como base de operaciones la población gallega de Rebordechao, y en pocos años, hasta su captura final en Toledo, en 1952, y en sus idas y venidas haciendo de guía de campesinas miserables hacia las ciudades, a través de los bosques mató a 13 personas: mujeres, niñas y niños. Nunca hombre adultos. Al parecer en medio de aquellos parajes desolados se apartaba de sus víctimas, se desnudaba completamente, y las atacaba desnudo, matándolas a mordiscos y desgarrándoles el cuello. Otras veces las degollaba con un cuchillo o las apuñalaba en el corazón mientras dormían en torno o una hoguera. Romasanta devoraba los cadáveres crudos, y problablemente los violaba. Y eso muy probable que violara mujeres y niñas vivas y que luego ya rendidas y agotadas, las matara mucho más facilmente a mordiscos. Romasanta comía carne humana e incluso pasaba vagando algunos días desnudos por el bosque comportándose como un animal. Luego borraba cualquier rastro de sus fechorías y enterraba los cuerpos mutilados y desollados, porque antes les desprendía toda la grasa con un cuchillo, y que guardaría en tarros de cristal. Por eso fué apodado el sacamantecas, porque quitaba la grasa a sus víctimas y luego la vendía en Portugal y Galicia a brujas, meigas y algún farmaceútico sin escrúpulos. Grasa humana que decían que tenía excelentes propiedades y que servía para elaborara medicamentos y brebajes supuestamente mágicos. El sacamantecas dijo que en ocasiones le acompañaban dos hombres lobos más en sus orgías de muerte: Don Genaro, de Valencia y un tal Antonio, de Alicante.
Estos datos son muy interesantes, per por razones sociales y judiciales nunca se tomó esta información de Romasanta en cuenta o creible y nunca se investigó si en al menos dos ocasiones actuó conjuntamente con otros dos hombres. Al parecer la cartas falsas no las escribía una mujer (como en el film a modo de favor, por hacerle de correo con un amante que está casado) sino que se las escribía este hombre Don Genaro (que era de buena posición y sabía leer y escribir y por tanto era un hombre culto) y debemos de suponer que Antonio, del que nada se sabe era amigo de Don Genaro. Es probable que Don Genaro pero un pervertido demente y por dinero y coacción conveciera al buhonero a que llevara alguna víctima a algún punto del bosque en donde sería atormentada, violada y asesinada. Evidentemente Don Genaro se llevaba a un amigo suyo pervertido y Romasanta al final puede que participara colectivamente en esas orgías de muerte y sexo. Romasanta se sobreentiende de que se separa de esa gente bien por miedo o por lo que fuera, y se traslada a otra región y es ahí en donde ya actua en solitario. Puede ser que sus tendencias homicidas fueran reales (matando tal vez a su mujer y a un algualcil) pero que estos hombres lo pervirtieran en rituales sádicos-canibales-sexuales que lo embriagaron. Romasanta explica que estaba poseido por un Fada (una bruja gallega) o maldito y que por efecto de esa maldición se transformaba en lobo y por eso mataba. El caso es que al final fué detenido y juzgado durante un año en Galicia, en donde fué condenado a muerte. Pero fué indultado, vuelto a juzgar y de nuevo condenado a muerte. Finalmente la reina Isabel II de España, le indultó de por vida, atraido por las crónicas sociales de aquel tiempo en torno a ese morboso caso, para que fuera investigado por doctores y científicos.
Al final todos concluyeron que Romasanta era lo que hoy conocemos como un asesino en serie, y era un asesino en serie, que tenía perfecta comprensión de lo que es el bien y el mal, que era inteligente, y que mentía y manipulaba para satisfacer sus ansias homicidas. A final en 1954 fué a una prisión y según dicen murió al poco tiempo ahí de forma natural. Tal vez fuera asesinado en la cárcel o ajusticiado secretamente por sus celadores. Otra versión dice que fué llevado a un bosque y desnudado, para que se transformara en lobo. Evidentemente no fué así, le dio un ataque de locura humicida e intentó huir por el bosque, pero fué muerto a disparos por los guardianes que lo custodiaban. Creo que todo esto último nunca sucedió y que es pura leyenda urbana, y que en realidad el hombre murío en la cárcel. Como veis la historia real es mucho más violenta y fuerte que el film original, pero no cabe dudad que el film, como película, es muy buena y la recomiendo encarecidamente a aquellos que entiendan de cine y les guste el cine de calidad.
Visit ojok nesu blogs for Daily Updated Hairstyles Collection
No comments:
Post a Comment